lunes, septiembre 04, 2006

El gato y la pantera.

El gato ronroneante se convierte en pantera. El espacio de mi cuerpo le queda estrecho, noto como se revuelve y da vueltas en mi interior. Se siente preso y su inquietud es la mía. Su desasosiego me obliga a coger el coche y apretar el acelerador. Escapar de casa. Huir. Escapar hacia lo que parece ser adelante. Aquí, ahora, no tengo sentido. Devoro kilómetros y el animal parece calmarse. Por si acaso no le doy tregua y sólo paro a poner gasolina. Hasta que llego a mi destino. Una cerveza en la terraza (¿desde cuando me he aficionado a la cerveza?), mi pequeña Moleskine negra y un motivo para esperar. El gato parece tranquilo ahora.

Ni tan siquiera he estado en Valencia dos días. Tres semanas en la Isla Encantada, un fin de semana largo en Madrid y volver a casa me ahoga.

Aquí el calor es sofocante. Por las calles parece que falta aire para respirar. Hoy ni tan siquiera he salido. Pensaba volver al Reina Sofía, hundirme en la contemplación de los lienzos, emocionarme ante algunos de ellos donde parece vislumbrarse una verdad... pero de pronto no me apetece moverme. Me siento cansada y es todo confuso, el gato se agita hoy. Pronto la realidad me agarrará del brazo y tendré que pensar seriamente en el trabajo y en como quiero enfocar mi vida. Pero por ahora soy incapaz de hacer planes. El calor es demasiado pegajoso, mi cuerpo se limita a sentir y mi cabeza ha dejado de pensar. Y aquí estoy, tirada en la cama revuelta comiendo chocolate y leyendo comics.

¿Y qué más da? De vez en cuando a una le viene bien tomarse vacaciones de sí misma.

5 comentarios:

Africanoaf dijo...

este post esta hace tiempo y extrañamente nadie dijo nada... sera que la gente esta encontra de las camas y los comics???
Yo estoy a favor, a veces hay que olvidarce que vos sos vos por un rato...

Galahan dijo...
Este comentario ha sido eliminado por un administrador del blog.
Galahan dijo...

Yo no estoy en contra, para nada, de las camas y los cómics. Es más, he pasado últimamente muchos de los mejores momentos de mi vida en ambos.

No se qué me gusta más, si el gato o la pantera que relatas... Pero sí se que los gatos suelen tener la capacidad de confiar en sus 7 vidas para vivirlas y sacar lo mejor de ellas.
No se si nosotros también tenemos 7 vidas, pero de la gente que suele decirse que las tiene lo que sí se es que es la que más se ha atrevido a vivir.

(Nota: El anterior comentario lo he eliminado yo mismo, que había escrito cosas y luego me he dado cuenta de que no iban aquí!)

Anónimo dijo...

¿un gato sabe como calmar a los duendes para que se entretengan haciendo sus travesuras por ahí y dejen de incordiar un ratillo?

besitos bombón

Esther Hhhh dijo...

Me apunto a tu escapada... Incluyendo la de ti misma. El pasado fin de semana también acabé cogiendo el coche y deborando km hasta llegar a mi Cabo favorito, para ver el mar un rato desde el acantilado, colgada a 20m sobre el mar, sabiendo que un paso en falso podría ser el fin... Me encanta estar allí.
Animo, y besitos corazón, a fin de cuentas piensa, Valencia tiene tantos rincones... Ahora mismo me perdería un rato por el Carmen ¿te apuntas?
Besossss