domingo, junio 25, 2006

La Bella Durmiente.

La Bella Durmiente
Edward Burne-Jones 1873


En fín, hacía cuatro horas que hablaban y no habían conversado ni la mitad de las cosas que tenían que decirse.

La Bella Durmiente.
Charles Perrault

Charles Perrault no inventó La Bella Durmiente, sino que recogió una historia tradicional y la adaptó al público infantil. Las versiones del cuento que en ese momento circulaban por Europa no eran "adecuadas" para que papá las leyera a sus retoños ante el fuego del hogar. Por ejemplo, una de las primeras versiones del cuento recogida en 1636 por Giambattista Basile en una colección titulada "Pentamerone" tenía la siguiente trama:

Unos sabios advierten al Rey de que su hija, Talía, corre el riesgo de pincharse con una aguja envenenada. A pesar de las precauciones Talía se pincha con una rueca y cae en un sueño profundo. El rey agobiado por la pena deja el cuerpo de su hija en el bosque y abandona el lugar.

Un día un príncipe que pasaba por alli....

Hasta aqui las dos versiones coinciden, en la de Perrault el principe besará a la princesa y romperá el hechizo. En la de Basile las cosas suceden de otro modo.

El principe que en la versión actual se contenta con un beso, en la original viola a la durmiente y se marcha. A los 9 meses Talía da a luz a los gemelos Sol y Luna pero no despierta de su sueño y los niños son cuidados por las hadas. Un día Sol chupa el dedo de la madre, extrae la astilla envenenada y por fin Talía abre los ojos.

El príncipe vuelve a pasar por allí, (ya sabemos a lo que iba) y al encontrarla despierta le confiesa que él es el padre de los niños, de ese modo los dos viven felices.... durante una semana. Al príncipe se le había olvidado decirle que estaba casado. Una semanita de carantoñas y de nuevo regresa al hogar conyugal (¿por qué será que esto me suena?).

La mujer del príncipe es malísima y al enterarse de su historia con Talía manda apresar a los niños y a la rompehogares, y pide al cocinero que degolle a los pequeños y que con su carne prepare un sabroso guiso para su marido. Cuando el príncipe está terminando la comida la mujer le informa de los principales ingredientes de tan apetitoso plato. El príncipe se apena muchísimo, pero no hay motivo para ello porque el cocinero había sustituido a los niños por una cabra y ellos están a salvo. Enfadada la esposa legal del príncipe decide hacerle pasar un mal rato a Talía, que ya ves que culpa tiene de nada, e intenta quemarla viva en una hoguera, pero el príncipe la rescata... y colorín colorado, este cuento se ha acabado.

Esto no es lo que contaba Disney, ¿verdad?

Encontrado en http://www.xente.mundo-r.com/diretes/

2 comentarios:

Africanoaf dijo...

Toda moneda tiene dos caras, es bueno conocer la segunda cara...
Y la verdad es que si yo tuviera que contarle a algun niño la historia, no se si le contaria la "legal" la que vos contas es mas real (y hasta mas educativa si queres).

Pulgarcito dijo...

Pues a mi me gusta más ésta versión... Y si me la hubieran contado de pequeño, me habría aficionado mucho más a la literatura.