martes, octubre 23, 2007

Moderno Prometeo.

Prometeo
Peter Paul Rubens 1612

Crear es indagar, darnos otro sentido. Escribimos para demostrar que estamos. Para entender, para comprender. La literatura es conocimiento y el escritor necesita de toda su capacidad de observación y ansia de conocimiento. Nos lo contaba Espido Freire en un taller de literatura creativa que hicimos este verano en Teruel. Me gusta escuchar a esta mujer. Es inteligente, rápida y divertida, muy alejada de esa imagen lánguida y un poco mística que desprenden sus fotografías. Ha leído mucho y variado, es capaz de relacionar la información y hablarnos tanto del recorrido vital de los héroes como de los símbolos sexuales de un vídeo musical. Me cae bien Espido. Insiste en que hay que escribir con la cabeza, que eso de escribir con las entrañas es un mito. Me dice que debo pensar qué es lo que quiero contar y cómo. Pero soy incapaz, por eso supongo que nunca seré una escritora. Lo poco que he escrito siempre ha sido por impulso. Una frase sucedía a la otra sin saber dónde iban a llevarme. Nunca he sabido qué es lo que quiero contar. Hay imagenes en mi cabeza claro, mis fantasmas particulares que tienen que ver con mujeres y sangre. Poco más. Dice Espido que la mera anécdota no es literatura, que sin un buen plano simbólico una historia no trasciende. Que no necesitamos ser originalísimos, que la literatura no es eso. Y tiene razón. A lo largo de los siglos nos hemos movido siempre en las mismas tramas y arquetipos. Los mismos personajes se repiten una y otra vez: La madre abnegada, el héroe salvador... La Ilíada y la Odisea, junto a la mitología griega, la Biblia y los cuentos de hadas componen la mayor parte de nuestro universo. Los héroes de las películas de acción que triunfan en todo el mundo son los héroes de siempre. ¿O Bruce Willis en La Jungla de Cristal no es Aquiles? Escribir es ir más allá del mero hecho de contar algo. El escritor es un moderno Prometeo sin castigo, el que roba el fuego de los dioses para entregarlo como un regalo a nosotros, torpes mortales.

9 comentarios:

Galahan dijo...

Eh, no, Brad Pitt es Aquiles en "Troya". Ah, vale, que era una metáfora y tal... vale. Una imagen.

Eso sí, a Bruce le fastidiaban los pies en la peli, en eso sí se parecían. Eso sí, faltaba Patroclo. Juju...

Tienes toda la razón y Espido también (encima hace poco anunciaba un jueguecito de la Game Boy Advance, así que me cae aún mejor, porque me parece bien que alguien así no caiga en la tontería de "videojuegos tontos" y demás demagogia).

Y bueno, la verdad es que yo soy uno de esos modernos prometeos en cuanto a escribir se refiere. Siempre voy prometiendo que voy a escribir un corto, un largo, un relato, un post... a prometer y prometer. Cualquier día me arrancan el hígado.

;)

Tanto! (Y chachi, que iba faltando la palabra).

Enttropia dijo...

Gal!!

Como dirían las ruvis: ombre lla!, que te me cargas la atmosfera!

;-)

Ruvias Intelijentes dijo...

que se la a cargao, el tio (la hatmosfera, dicimos)
anda que...

tienes toda la razon. i espido tamvien. manque es berdad que sale asin como languida i eso en las afoticos.

i escrive, ombre lla, que nos tienes hesperando tu primer livro. que semos superfanses. i olles, escrive sovre mujeres i sangre. que a nosotras nos enjantan los dramas.

vesissssssss

Max dijo...

Escribir, escribir... relatar, decir, trascender, remontar recuerdos, imagenes, olores. Decir que uno "escribe con la cabeza" es totalmente arriesgado, es totalmente injusto tal vez...
Escribir con la cabeza es algo que sin duda se pueda explicar con un puñado de herramientas científicas.
Pero escribir con las "entrañas" tal vez no sea tan sencillo de explicar, tal vez sea mas interesante no explicar...
Cuando hablas de vos, de que nunca podrás ser escritora, al mismo tiempo explicas que si puedes serlo, "lo poco que he escrito ha sido siempre por impulso"...
Que bella manera de poder escribir... que sucedería si lograras poder controlar esos "impulsos" a tu gusto?
No sería tan maravilloso...
Sigue escribiendo "por impulsos" me agradas mucho, gracias por dejarme escribir estas locuras "de la cabeza"

Anónimo dijo...

Yo tampoco seré jamas escritora, porque tampoco sé usar la cabeza para escribir.

Los escritores que escriben con las entrañas sólo pueden ser poetas. Pero para eso tampoco lo seré, porque me falta ángel. Así que no seré Prometeo.

Yo creo que los escritores, los aunténticos, nacen de un difícil y curioso esquilibrio entre las entrañas y la cabeza, entre la inspiración y la técnica, entre el corazón y la razón, que no se puede buscar. Que, como casi todas las cosas grandes, simplemente sucede.

¿Y seguro que no tienen castigo? No me lo creo. Seguro que hay un castigo. Siempre lo hay, ¿no? ¿O el peso de mi gris formación judeocristiana me empaña la vista haciéndome desconfiar de todo lo bueno?

Esther Hhhh dijo...

Ains mi querida Enttro.. Poco a poco, poco a poco se logra..
Yo siempre he dicho que no me veía capaz de escribir uno de esos tochazos que tanto me gusta leer. Que lo mío son los relatos cortos... Tengo varias historias largas sin acabar, empezadas pero no continuadas, esperando que algún día las lleve a cabo y por desgracia, alguna probablemente ya no lo haga, pues ha perdido parte de su sentido.

Pero mira, Enttro, ahí está Pris. No quiero hablar muy alto, porque hace tiempo que no escribo sobre ella. Pero he conseguido crear un personaje que me engancha, que me da curiosidad y sobre el que quiero seguir investigando. Hasta tal punto ha llegado Pris, que para mí es real, yo me siento tranquilamente a escucharla y ella me cuenta sus cosas... Creo, Enttro, que todo es cuestión de tiempo. Y de paciencia. Al final encuentras la forma de escribir una historia larga. De verdad.
Pero oye, tampoco pasa nada si te quedas en los relatos cortos. Alomejor lo tuyo son artículos de opinión, como los de Fernando Delgado, por ejemplo. O relatos breves o columnas como la columna de Carrie (Sexo en N.Y., me encantaba esa serie).
A mí personalmente lo que más me gusta de los blogs es precisamente que son relatos cortos. Y echo en falta que periódicos, diarios y revistas incluyan ese pequeño relato, a veces con continuación, otras no, que antaño aparecían en todas las publicaciones...

Besitosssss

PD: ¿A que no has pasado a leer el post que te he colgado, el que te dije de Buster? ainssssssssss Yo que colgué mi articulillo publicado para ti y va y no lo lees mala so mala.
PD2: Por cierto, podíamos juntarnos a hacer el recorrido del Limón-express, jejejejejee

Ahora si besitos, menudo sermón te he soltado.

Enttropia dijo...

Esther, que sepas que eres una bocazas! (que no... que es broma) :-) Gracias al pequeñajo pude entrar en tu relato y me lo leí enterito de cabo a rabo. Está muy bien escrito, joo.. tienes una facilidad pasmosa. Admiro a esa gente que, como tú, escribe frases que fluyen una tras otra con naturalidad. Parece que broten de manera espontánea y sus creadores no han tenido que esforzarse para escribirlas. Eso es talento, no? :-) Y esfuerzo y trabajo, por supuesto. Ya me irás contando más cosas de Pris, suena muy bien, me alegro.

Maximiliano, eres muy amable, pero creo que Espido tiene razón. es nuestra mentalidad romántica la que nos hace imaginar al escritor en un arrebato de inspiración, inclinado frenético sobre el papel para que no le abandonen las musas. pero la literatura no es así, requiere de genio, por supuesto, pero es un trabajo cerebral, medido y pensado. No caigamos en el absurdo de quitarle mérito sólo porque nos estropea el mito! :-) pero sí, controlar el impulso como dices, suena bien, quizás ahí esté la clave.

Os agradezco muchísmo los ánimos, ruvis. Me encanta que seais tan superfanses aunque ya no me hago mechas ni nada ;-) Pero soy una huevona y aunque es una especie de sueño lejano, me siento incapaz de escribir nada. Soy lo peor, lo sé :-(

Me parece Kamala, que tú ya ere sun Prometeo, sin castigo, espero. Un Prometeo que regala un mundo nuevo a sus alumnos, ideas de un mundo mejor a sus amigos y a los que la conocen. Y a los que te leen. Coincides con Maximilano en la combinación de sentido y sensibilidad, homenaje a Austen ;-) y creo que tenéis razón . La clave está en un equilibrio extraño aderezado con una dosis importante de genio creativo. Ah, y olvídate de todas las cosas malas que esa cultura judeocristiana nos ha traído: ni castigos ni culpables. Como dirían las ruvis: ombre lla! :-)

Esther Hhhh dijo...

Ains Enttro, que me vas a poner rojita... Supongo que te refieres al post sobre trenes que hay antiguo, el del enlace que te dejé.
Ahora me falta saber si has leído el que colgué para ti, con dedicatoria y todo. Ese es de los últimos que hay (acabo de escribir nuevo post, así que ahora llevas más retraso de lecturas)...
Ala, venga, corre y ponte al día, que me tienes contenta, jejejejeje

Besitossssss

Enttropia dijo...

Uups!! Soy una bocazas! soy una bocazas! ay, ay...