martes, septiembre 11, 2007

Barbazul.

Barbazul
Ilustración de Gustave Doré


Dice Clarice Lispector que preguntarse quién soy yo provoca necesidad. Dice que quien se analiza está incompleto. Y sin embargo necesito hacerlo. Supongo que de eso trata este Principio de Entropía Intermitente: masturbación exhibicionista de las emociones. Lágrimas en público, risas en público. Catarsis.

En los últimos meses he aprendido mucho, quizás porque después de tanto tiempo por primera vez me he enfrentado al proceso de duelo y no he arrinconado el dolor en un cajoncito oscuro de mi memoria. No, por intuición, error o locura me he convertido en la nueva mujer de Barbazul y he decidido utilizar la llave para abrir la puerta prohibida. El descubrimiento, los cadáveres y el horror golpean al principio pero ahora las manchas de sangre en la llave ya casi no me angustian, son marcas de vida, cicatrices de viejas heridas que he dejado sangrar y sangrar para que en su interior no quede ni una pizca de podredumbre. Para que se cierren limpias y dejen mi alma sana.

Jamás hubiera imaginado lo difícil que es dejar morir, deshacerse del lastre y llorarlo sin lanzarse tras él al mar para rescatarlo o hundirse con él.

7 comentarios:

El Perro Mistetas dijo...

A veces eres más cristalina, Principio.
De cualquier manera, está bien tenerte de vuelta.

Anónimo dijo...

Cuando te mostré este blog, en "lost in trasllation", no pensé que quizás pudiera servir para llegar a ti en un principio de entropia permanente.
Barcelona no es tokio, pero siguen sin tener razón los días laborables... y prefiero elegir del plato de la vida lo que más me gusta que comer a bloque del plato comunitario que me toca (¿he aprendido a usar "a bloque"?). Creo que no leerás nunca este comentario... si lo lees, me gustaría decirte que nosotros tenemos razón y que ellos SIEMPRE están equivocados...y que un verso susurrado por ti seria el mejor regalo posible...porque me gusta ver flotar las burbujas en el carrefour de dos rios a las afueras de Lyon (recuerdos y sensaciones) y me niego a los reajustes emocionales.
DRYMARTINI

Esther Hhhh dijo...

Bien, Entro, por fin vaciándote de dolor, dejando el lastre...
Ojala todo vaya bien a partir de ahora...

Mis más dulces besos para ti, muacks

Galahan dijo...

Anda, los coments estos son como un tronquito de un parque, ahí con declaraciones y todo!

Bienvenida a barbacastaña.
Y suerte con todo lo que has aprendido, te hará feliz.

;)

Enttropia dijo...

Hala, qué alegría más grande ver de repente tanta gente y tanto cariño por aquí. De pronto me encuentro con una historia de amor esbozada en mi pequeño cuaderno y me pregunto qué ocurrió en Barcelona y en Lyon. Y claro que tienes razón Drymartini! ellos siempre se equivocan. No dejes de pedirle que te susurre versos al oído...

y por favor, ¿nos contarás la historia de Lost in Traslation y la Entropía Intermitente?

El perro, me alegra conocerte, y me da mucha risa que hayas elegido ese chiste absurdo como nombre! :-) Siento haber escrito un post algo confuso, es porque ando perdida en lecturas muy particulares y parece que he asumido algunos códigos sin darme cuenta.

¡Hola Esther hhhh! ¿Qué tal tus exóticas vacaciones? ¡Eres un celete! Creo que ya hace tiempo que lancé algunos fardos al mar, pero hasta hace poco no me había dado cuenta de que empiezo a sentirme ligera. Espero que tú también te sientas libre. Un besote.

Galahan, ya sabes cuanto me gustan los árboles, pero prefiero los de un bosque perdido lleno de secretos y petroglifos escondidos a cualquier parque del mundo :-) Aunque espero que Sandra venga por aquí y le susurre un mensaje a nuestro amigo.

¡Gracias a todos!

Anónimo dijo...

Pobre jedi. Es ahora, al final, cuando empiezas a entender...

Anónimo dijo...

¿El final?
Espero que te refieras al tuyo. Estaría bien.